KAT TORRES: Influencer condenada por trata y esclavitud de mujeres

Reina Baiz Villafranca

@AbogadaReinaBaiz

 

¿Cuántas personas se autoproclaman gurús / expertas del autocuidado y bienestar? ¿Tienen credenciales? ¿Basta con realizar unos cuantos cursos para ser expertas? ¿Basta con tener una presencia arrolladora que atrae e impacta en las redes sociales? en los últimos tiempos las personas buscan, en muchas ocasiones desesperadamente, tener modelos o esas personas influencer, a quienes seguir, que le inspiran, olvidando el viejo dicho “que no todo lo que brilla es oro”.

En las redes sociales, las personas publican lo que quieren presentar, cómo se quieren vender, pero que evidentemente no es la realidad, no obstante, sirve para atraer / captar el interés de otras personas, que tienden a escribir, contactarlas y esto puede cambiarles completamente la vida.

Como en el caso de KAT TORRES, una influencer AUTOPROCLAMADA GURÚ DEL BIENESTAR, que fue condenada por trata y esclavitud de mujeres, representando un ejemplo alarmante de cómo las plataformas digitales y la figura del «influencer» pueden ser utilizadas como fachada para actividades criminales graves, como la trata de personas. Precisamente, la condena de Torres a ocho años de prisión por tráfico y esclavitud de mujeres en Brasil, tras una investigación del FBI por la desaparición de dos brasileñas en Estados Unidos, subraya una modalidad de explotación que se disfraza de «oportunidad» y «bienestar» (BBC News, 2024; Solomon, 2024).

En la que el método de captación y explotación utilizado por Kat Torres, una ex modelo y «coach de bienestar» con una gran cantidad de seguidores en Instagram, utilizó su historia de superación personal para atraer a mujeres jóvenes, principalmente de Brasil, en su discurso prometía una vida de éxito y lujos en el extranjero, lejos de la pobreza, similar a la que ella proyectaba en sus redes sociales, basándose en la manipulación psicológica, el abuso de la vulnerabilidad y la creación de una relación de dependencia (NDTV, 2024).

Una de las sobrevivientes Ana señala para la BBC que «Ella me evocaba una suerte de esperanza«, describiendo su reacción al toparse con la cuenta de Instagram de Kat Torres en 2017, sintiéndose atraída por la trayectoria de Torres, desde las favelas de Brasil hasta las fiestas y pasarelas internacionales, desconociendo que se trataba de medias verdades y mentiras. Lo cierto es que Ana se encontraba en una situación de vulnerabilidad, había sufrido violencia basada en género desde la niñez, hasta tener una pareja abusiva, quedando expuesta a otras formas de violencias, como lo es la trata de personas, que inicia con la captación realizada por Kat Torres.

Una vez en Estados Unidos, las sobrevivientes eran sometidas a un régimen de control total, siendo forzadas a trabajar sin remuneración, en condiciones insalubres, y se les restringía su libertad de movimiento y comunicación con el mundo exterior. El control de Torres sobre ellas era tal que, en algunos casos, las explotaba sexualmente (BBC News, 2024).

La situación de las sobrevivientes se agravaba al no tener medios económicos o redes de apoyo que les permitieran escapar, quedando atrapadas en una situación de explotación laboral y sexual.

En este caso, se demuestra la relevancia del papel de las redes sociales y el «engaño digital», evidenciando cómo la trata de personas ha evolucionado, utilizando herramientas modernas para su consumación como las tecnologías de información y comunicación, convirtiéndose las redes sociales, en este caso, en un instrumento clave para:

  1. Legitimar al tratante: La imagen de Torres como una «influencer» exitosa y una gurú espiritual creíble le permitió generar confianza en sus potenciales víctimas, aprovechándose de su vulnerabilidad.
  2. Difuminar la realidad: Las publicaciones de lujo y bienestar en sus perfiles de Instagram ocultaban la cruda realidad de explotación que vivían las mujeres en su casa.
  3. Mantener el control: Torres utilizaba las redes sociales para monitorear a las víctimas e incluso las obligó a publicar videos para desmentir que estuvieran retenidas contra su voluntad, lo que complicó la labor de las familias y las autoridades para localizarlas (NDTV, 2024).

La condena de Kat Torres es un recordatorio de que la trata de personas no siempre se presenta con la violencia explícita, directa, las desapariciones, sino que puede manifestarse a través de un engaño sofisticado y bien orquestado, utilizando la influencia digital para victimizar a personas vulnerables que buscan bienestar y una mejor calidad de vida.

Fuente:

El impactante caso de la influencer latinoamericana condenada por trata de personas y esclavitud https://www.bbc.com/mundo/articles/c727dgpp17xo

Publicado en https://feminismoinc.org/2025/08/kat-torres-influencer-condenada-por-trata-y-esclavitud-de-mujeres.html